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Año: 2016 Mes: OCTUBRE 2015-MARZO 2016 Número: 75 - 76
Sección: PRÁCTICAS DE CLASE Apartado:
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ALGUNOS ELEMENTOS DE LA FUNCIÓN TUTORIAL EN LA EDUCACIÓN BÁSICA.
Mtro. Gerardo

ALGUNOS ELEMENTOS DE LA FUNCIÓN TUTORIAL EN LA EDUCACIÓN BÁSICA

Mtro. Gerardo[1]

Supervisión de Zona DGES

LA FUNCIÓN TUTORIAL

La función tutorial es una gran oportunidad para los docentes que se inician en la función docente, pues son múltiples países alrededor del mundo que ya utilizan esta modalidad de introducir a los profesores noveles al sistema educativo. La misma tiene su grado de complejidad, pues simultáneamente se debe fortalecer las capacidades, conocimientos, y competencias, del profesor novato mediante el acompañamiento, apoyo, y seguimiento de la labor docente, amén de que debe contribuir a la formación y buen desempeño, para de este modo coadyuvar a que el mismo logre su permanencia como docente, a lo largo de los dos años en que se nos encomiendan.

Una parte fundamental de esta labor, es sin duda lograr mejores aprendizajes en los alumnos, así como la forma en que son evaluados para poder así emitir una calificación parcial o total.

Dentro del marco de responsabilidades que tienen los tutores, está la de compartir sus experiencia en varios aspectos, como puede ser: la resolución de problemas diversos que se van presentando, como es el caso de: lograr aprendizajes verdaderos, formas de estudio, evaluación, lectura, escritura, pensamiento matemático, de conducta. Observar su trabajo cotidiano para incidir positivamente en los resultados obtenidos previniéndole sobre la necesidad de contar con evidencias de todo lo desarrollado.

Conjuntamente debemos analizar: sobre las formas en que aprenden los alumnos, así como estilos de aprendizaje, estrategias para mejorar los aprendizajes, que ayuden a tener las conductas deseadas y logren la permanencia y promoción de los alumnos.

Para ello se requiere que el tutor se vea como par del maestro novato, ambos ejercen la misma profesión, por ello deberá de desarrollarse una idea de tutoría como acompañamiento. En contraparte el ejercer una función de tutor como alguien que tiene la verdad y el otro deberá de seguir sus ideas, experiencias e indicaciones no es lo requerido. Al respecto describiremos los arquetipos de la tutoría, estos son: Tutoría como apoyo, Tutoría como autodesarrollo colaborativo y Tutoría como supervisión.

En el primero, tutoría como apoyo Las funciones del tutor van de la mano con las del tutorado. El tutor lleva un registro de las observaciones realizadas al tutorado, así como de los acuerdos, dudas, necesidades y problemas, para hacer un análisis y poder intervenir adecuadamente. La tutoría le permite tanto al maestro novel como al maestro experimentado, aprender el uno del otro teniendo como objetivo la mejora de la práctica docente. Implica comunicación asertiva y confianza entre los involucrados donde cada uno debe reconocerse como profesional de la educación.

En el segundo arquetipo, el tutor como un proceso de autodesarrollo colaborativo, podríamos decir que la frase: Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo resumen lo que se espera de esta relación, desde dicho enfoque. Aquí es importante que como tutores se marquen líneas de acción sobre las cuales los docentes puedan moverse en libertad, sin perder de vista la misión general. En el caso de la educación básica, esa línea de acción se mueve en torno al perfil de egreso, las competencias para la vida, los campos formativos y los principios pedagógicos; debemos lograr que los docentes encuentren sentido en estos aspectos de tal forma que efectúen su trabajo con creatividad dentro de un marco de flexibilidad.

El tercer tipo, es el de la tutoría como supervisión, es el menos deseable ya que si bien se apega a los aspectos normativos que rigen la vida escolar, también es cierto que se vuelve con este criterio una actividad de censura y vigilancia del trabajo docente. En este enfoque el tutor deberá exhortar a su tutorado a detectar sus necesidades de capacitación actualización y superación, pero sin dar oportunidad al docente novato de expresar sus habilidades y aprendizajes que sobre la materia tiene ya que a fin de cuentas es un profesional de la educación formado con las ideas más modernas de la pedagogía y con muchas horas de práctica frente a grupo. La censura y la vigilancia no ayudan al desarrollo del novato, por el contrario lo restringe e inhibe en su accionar, pues actuará según vea que es aceptado por el censor – vigilante y no actuará según un diálogo con un colega.


La tutoría como recurso para afrontar las necesidades y problemas de la práctica profesional

Los arquetipos de tutor – tutoría excepto el de censor – vigilante requiere que se cuente con una habilidad comunicativa, que genere un clima de confianza y a su vez organice sus conocimientos y experiencia como docente para poder transmitirla, esto podrá  promover en el docente tutorado una práctica reflexiva y analítica, dada esta situación esta labor va encaminada a ciertas responsabilidades propias de la función tutora y que son:

·         Desempeñar las funciones para mejora de la práctica docente

·         Observar el trabajo del maestro novel para mejorar el desempeño al interior del aula, (con los alumnos concretamente) y el trabajo realizado por el tutorado

·         Planificar esa observación, a realizar de una de las clases del tutorado

Con ello deberá de generar una relación de dialogo, ya que el aprendizaje entre pares es sumamente importante, porque se dará la retroalimentación de manera directa y significativa, ya que el docente novel (también) inicia su vida profesional con una serie de conocimientos teóricos importantes, que puede irnos transmitiendo de manera indirecta y que a su vez también irá reforzando nuestros conocimientos y fortaleciendo nuestra experiencia docente.

No olvidando que el docente nuevo es también un profesional de la educación al igual que el tutor, es importante tomar en cuenta esto, sería importante que el docente tutorado reconozca que tienen algunas deficiencias  y acepte el apoyo brindado por el tutor  ya que esto le implicará aplicar estrategias propuestas por ambos, de acuerdo a la problemática  propia del grupo que se le asigne, a su vez se le propondrá el manejo y utilización de ciertas herramientas y técnicas de evaluación, encaminado a la mejora de los aprendizajes y trabajo en el aula, ya que si se cumple con esta con esto se verá reflejado en los resultados y aprovechamiento que reciban los alumnos, que son la parte medular de esta actividad.

Se espera que los docentes nuevos estén de acuerdo con las propuestas de cambio que se le sugieran, y las dinámicas que se recomiendan, para un mejor aprovechamiento de los alumnos, y aceptan las recomendaciones de manera responsable, complementando las propuestas o sugerencias,  además de que se empeñan en adquirir nuevos conocimientos, uso y aplicación de las nuevas tecnologías como recursos didácticos para la mejora dentro del aula. E tanto que los docentes con más antigüedad en el servicio, que presentan deficiencias en sus resultados, se inconforman de las propuestas de mejora, las ponen en duda, la aplicación de estrategias para la mejora de la enseñanza no la consideran, ni mucho menos la aplican, y se empeñan en seguir utilizando las técnicas tradicionales (dictar, leer o copiar), y lo peor es que no consideran viable que una persona más joven que ellos les trate de enseñar algo y en muchas ocasiones ponen en duda la experiencia  de las personas que les están sugiriendo modificar su forma de trabajo y que se actualicen en cuanto al uso de nuevas estrategias, recursos, dinámicas y tecnologías.

Herramientas para la tutoría

La tutoría será una función que desarrollará un maestro con experiencia en trabajo frente a grupo, que tenga una aceptación por la comunidad escolar debido a la calidad de su trabajo y a su trato personal, ese es un punto de inicio, pero para realizar dicha función es necesario que el tutor recupere y aplique herramienta de trabajo que le permitan realizar dicha función de forma sistemática, ya que el trabajo en las escuelas, en tanto modificaciones del trabajo de los docentes, es asistemático.

Las herramientas básicas para que el tutor, observe, dialogue, planifique, registe la actividad del novato y pondere deberán de ser las siguientes:

Técnicas de observación: Para observar las clases del tutorado  y obtener la mayor información posible así como para favorecer en el docente técnicas de evaluación de las actividades desarrolladas por los alumnos, se empleará el enfoque de observador secundario, aquel que ve la práctica del novato como única y no como una práctica deficiente en desarrollo hacia el modelo del tutor.

Trabajo colaborativo. Para aprender entre pares tutor-tutorado, así como las recomendaciones pertinentes para el trabajo desarrollado por los alumnos como es el caso de los proyectos educativos. Dentro del entorno escolar el novato deberá de integrarse a la escuela como un colegiado y no de forma individualizada, el logro será, así se ha de enseñar, compartido y no algo individual, al igual que las áreas de oportunidad que como escuela se irán abriendo de forma constante.

Comunicación efectiva (escucha atenta, asertividad). Para ganar la confianza del tutorado y establecer una buena comunicación. Proporcionarle formas adecuadas para establecer una buena comunicación con alumnos y demás actores en su desempeño profesional.

Planeación y manejo de recursos didácticos. Para establecer el plan de acción conjunto, como sugerencia para el desarrollo del plan de clase del docente, y  los recursos didácticos: como sugerencias para su adecuado y oportuno manejo.

Conocimiento experiencial sobre lo que significa ser profesor. Como estrategia, el tutor debe narrar experiencias propias o ajenas en las que se obtuvieron buenos o malos resultados, para de este modo el neodocente pueda conocer estas experiencias y denotar acciones que dan resultado y redunden en una mejor labor docente, tomando en cuenta experiencias de otros.

Aprendizaje profesional entre pares. Demostrar que es más fácil cualquier actividad a desarrollar si se emplean diferentes puntos de vista, si se parte de que no todo lo sabemos y que es mejor compartir.  Esta práctica no solo es recomendable entre tutor- tutorado, también es útil entre los alumnos, pues sin duda alguna en algunos casos, se aprende  mejor entre iguales.

Manejo de evidencias. Hacer notar que siempre es necesario tener elementos suficientes para una rendición de cuentas, que de todo lo realizado se debe tener forma de comprobarlo. Y en el caso de los novatos así como él pedirá a sus alumnos un portafolio de evidencias de los trabajos realizados, él deberá de desarrollar el suyo con productos de sus grupos.

Análisis de información. El registro que se realizará de la actividad del maestro novato, debe de categorizarse para así lograr construir elementos de análisis que permitan valorar el trabajo del docente nuevo de forma sistematizada y con evidencia de tipo empírica.

Desarrollo de liderazgo. Es importante que se considere a todo docente como un líder positivo al que es conveniente seguir, en el caso de los alumnos sirve para hacer  más fácil que sigan las indicaciones y trayectorias que se les indiquen.

Clima organizacional. Es de vital importancia para la mejor obtención de resultados en cualquier rubro. Se debe verificar que el docente novato proporcione a los alumnos una forma organizacional tanto para la realización de trabajos grupales, colaborativos en equipos  como en lo individual, debe de cumplir con la prioridad educativa de la inclusión, promoviendo procesos de interacción y convivencia armónica dentro del grupo.

Técnicas de evaluación: El tutor deberá de saber de los aspectos básicos de la evaluación, para que a partir del registro y análisis de ellos pueda tomar decisiones respecto del desarrollo del trabajo del neodocente y comentar al respecto con él. También es importante que el docente conozca las diversas técnicas de evaluación, así como los momentos idóneos para su implementación, que elabore rúbricas para los aspectos meramente cualitativos, listas de cotejo, y todos aquellos elementos que sirvan como evidencia de los aprendizajes esperados de los alumnos.

Manejo de conflictos. Es muy importante fomentar en el docente, diferentes rutas (existentes) para la resolución de conflictos, así como la forma idónea de prevenir los mismos; pues es común que se presenten cotidianamente los mismos entre alumno- alumno, alumno- docente, alumno- padre, padre-docente, autoridad-docente.

Ese conjunto de herramientas aunado a la voluntad del tutor por acompañar a su par en el desarrollo de la profesión docente complementarán la voluntad con la pertinencia técnica.

Tutoría, organización escolar y legislación educativa

Las acciones del tutor con su tutorado deberán de redundar en insertar al maestro novato en el ambiente de la escuela donde trabaja para que reconozca y viva la cultura magisterial que ahí se crea, sin embargo esta no deberá de orillarse a fomentar vicios que de alguna u otra forma han germinado en el interior de las escuelas. Por ello deberá de apegarse a los máximos intereses de la educación, los de los alumnos y la sociedad que los cobija y regirse por el mandato constitucional, por ello aquí se habla de retos de la tutoría pero no en abstracto, sino enfocados a seguir el compromiso (ético) que todo profesional de la educación adquiere al ingresar al magisterio.

Un primer reto para la tutoría, es lograr que los docentes tutorados realicen todo su quehacer educativo basado en los resultados del Progreso Científico, el cual tal y como está establecido en nuestra Constitución, luchará contra la ignorancia y sus efectos, las servidumbres, los fanatismos y los prejuicios. Por ello el tutor debe establecer a través de sus diversas herramientas que todo el quehacer docente refleje este hecho.

Otro reto fundamental, es lograr que la educación que se imparte tenga calidad, con base en el mejoramiento constante y el máximo logro académico de los educandos. Muchos de los docentes en funciones desconocen el concepto de calidad aplicado a la educación, también la forma en que deben medir la misma, el análisis de resultados y la forma de tener evidencias de todo lo realizado en el día a día, como un mecanismo eficaz en la rendición de cuentas.

Un reto no menos importante es lograr que la educación sea Inclusiva, y es labor fundamental del tutor establecer con el tutorado mecanismos que permitan se logre la inclusión de todos los alumnos, tomando en consideración sus diferencias individuales, sus características específicas, de género, cultura, biopsicosociales u otras, que le generen barreras para el aprendizaje, y/o “Necesidades Educativas Especiales”; es primordial que el docente realice un diagnóstico lo más completo posible, con la finalidad de realizar las adecuaciones curriculares necesarias. Existen situaciones que ponen en condición de  desventaja algunos alumnos, como es el caso de que presenten problemas para una correcta lecto-escritura, o que no dominen la realización de operaciones  matemáticas básicas, debido a que estas herramientas son las que más utiliza un individuo para lograr procesos autodidactas o denominados de aprender a aprender, por lo que el docente debe estar pendiente de estas deficiencias para poder subsanarlas y revertir efectos negativos en el aprendizaje.

Un  reto de la tutoría es incidir favorablemente en el neodocente, para que el  mismo atienda la Diversidad, es decir, tome en consideración los diferentes tipos de alumnos que se nos pueden presentar por pertenecer a una diversidad cultural diferente, es por ejemplo de los alumnos que son indígenas o pertenecen a una etnia, o son extranjeros, o binacionales. También se deben tomar en consideración este tipo de variables, pues en algunos casos discriminamos, omitimos, o permitimos la discriminación de personas por no tomar en consideración sus características culturales, de raza, religión, género, discapacidad, orientación sexual u otra, en  la que una mayoría proporcione un trato diferente a una minoría que considera diferente. Este tipo de situación es en la actualidad muy penada, y múltiples docentes han tenido problemas por desconocimiento de sus obligaciones como servidores públicos.

El reto que responde a la necesidad de organizar la forma en que labora la escuela en conjunto, es en relación a la Autonomía de Gestión Escolar. La misma se logra entre otras cosas a través del establecimiento de una Ruta de Mejora en cada escuela. En la misma, cada docente debe colaborar en el diseño implementación, análisis y restructuración de la misma. Durante la etapa de diseño, el docente debe colaborar activamente en el diagnóstico de la escuela, determinación de los problemas más ingentes, establecimiento de objetivos, metas estrategias, mecanismos de implementación, seguimiento y evaluación así como responsables. Durante la etapa de implementación el docente debe participar activamente en las diversas comisiones; y en la etapa de análisis de la misma, el docente participa activamente en las Juntas de Consejo técnico en el análisis de resultados y reestructuración de la Ruta de Mejora. Como puede apreciarse es una labor ardua y constante en la que la labor de la tutoría acompaña al docente, en las diversas etapas para que su participación logre el impacto deseado.

A guisa de reflexión

Por lo anterior, cuando se le asigne a un docente recién incorporado formalmente al sistema, pero que ya tenga años de servicio y de experiencia, va a ser un reto enorme, pues tendremos que hacer labor de convencimiento, para que acepten y apliquen las sugerencias o propuestas que modifiquen sus paradigmas. Se considera que uno de los mayores retos del tutor, será guiar y no prescribir, orientar y no enviar, dialogar y no imponer. Como podemos ver agrandes rasgos es una labor ardua y compleja, pero al final del camino, seguramente muy satisfactoria, pues se logrará no solamente mejores docentes, sino mejores resultados con los alumnos que es el objetivo fundamental de cualquier modelo educativo y sus reformas.


[1] El maestro Gerardo cursó el diplomado en formación de tutores primera generación, cedió sus ideas pero prefirió conservar sólo su nombre para este escrito.


Artículo publicado en la Revista Xictli de la Unidad UPN 094 Ciudad de México, Centro, México. Se permite el uso citando la fuente u094.upnvirtual.edu.mx

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