Año: 2014 Mes: ENERO-MARZO Número: 71
Sección: INVESTIGACIÓN Apartado: Pedagogía
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LOS MITOS EN TORNO A LAS UNIDADES DE APOYO A LA EDUCACIÓN REGULAR. APRENDIENDO JUNTOS LOS DIFERENTES
Elida Rodríguez Ramírez

 

 

Mito 1: “Los alumnos que enfrentan BAP son sólo responsabilidad de la USAER”

En muchas escuelas es común escuchar, la frase de “El niño de USAER”, lo cual de manera implícita deja ver, que la comunidad educativa aún cree que los servicios  de Educación Especial son los únicos responsables de dar respuesta a las necesidades de aprendizaje de los alumnos, no obstante es necesario aclarar que dar respuesta a la diversidad de una escuela no es sólo labor de los profesionales de educación especial, sino que la Educación Inclusiva implica pasar de la responsabilidad única de la Educación Especial a la corresponsabilidad entre todos los profesionales, así como de los padres de familia.

 

Mito 2: “Los docentes de apoyo de la USAER, son especialistas que evalúan el desempeño docente”

Es importante precisar que el apoyo que proporciona la USAER  a las  escuelas es de orden curricular, a través del despliegue de estrategias de asesoría, orientación y acompañamiento, para impactar en  las acciones de los docentes, con la finalidad de que todos los alumnos puedan desarrollar competencias.

Por lo que las maestras de apoyo no buscan juzgar tu trabajo o degradarlo, sino por el contrario, quieren sumarse al trabajo de los docentes, para construir corresponsablemente una escuela pública caracterizada por la  calidad, la inclusión y la seguridad; pero para lograr esto, el servicio se ve en la necesidad de hacerte algunas sugerencias que permitan enriquecer tu trabajo y dar respuestas a la diversidad de tu grupo.

 

Mito 3: “El equipo de USAER trabaja con los niños que enfrentan BAP en el aula de apoyo”.

El apoyo que ofertaba la USAER, se centraba en la  atención directa a los alumnos con Necesidades Educativas Especiales, mismos que se llevaban al aula de apoyo, donde se les brindaba una atención personalizada y regularizadora; pero con el nuevo Modelo de Atención de los servicios de Educación Especial  (MASEE) que llega en el año 2009,se ve la necesidad de  resignificar, las N.E.E., que son las dificultades que presenta un alumno al acceder al currículo que le corresponde por edad, requiriendo de apoyos adicionales, para trasladarnos al concepto de Barreras para el Aprendizaje y la Participación (BAP).  Las BAP son factores que pueden marginar o excluir a los alumnos, surgiendo en las interacciones  entre los niños y sus contextos (escolar, áulico y socio-familiar); las cuales serán identifica- das a partir de un análisis crítico  sobre algunos aspectos de la dinámica escolar.

A diferencia de las N.E.E., estas no son originadas por el sujeto; sino mas bien son condiciones de vida que implican a todo el alumnado; por lo que ahora el apoyo  es con el docente, para que de manera colaborativa se promuevan ambientes de aprendizaje incluyentes, democráticos y lúdicos, donde se pongan en manifiesto el respeto, colaboración y la participación de todos los alumnos, por lo que la respuesta a la diversidad es dentro del aula.

 

Mito 4: “El equipo de USAER dedica mucho tiempo en actividades administrativas en lugar de trabajar con los alumnos”.

Es común escuchar que cada vez que los docentes requieren del apoyo de USAER, las maestras de apoyo están dedicadas a llenar formatos o a redactar informes que pareciera no tiene gran importancia, no obstante lo que en realidad está realizando todo el equipo de trabajo, es recopilar y analizar información  sobre el contexto escolar, áulico y socio-familiar,  con la finalidad de reconocer los ambientes  donde se desarrolla el proceso de aprendizaje, y a su vez identificar  las Barreras para el Aprendizaje y la Participación (BAP) a las que se enfrenta el alumno.

Es por ello, que de pronto pareciera que USAER se dedica a realizar solo asuntos administrativos; no obstante esta etapa es fundamental para poder determinar las estrategias  para minimizar las BAP y así evitar  la presencia de cualquier tipo de discriminación , exclusión o limitantes al aprendizaje y participación.

 

Mito 5: “Los alumnos con discapacidad no aprenden, sólo desarrollan habilidades sociales”.

Aun existen muchos prejuicios en torno a la población que enfrenta un diagnóstico de discapacidad, puesto que la seguimos visualizando como una “limitación” y en muchas ocasiones la vemos como un factor que disminuye la calidad educativa de una escuela.

Pero en la actualidad la USAER retoma el  “Modelo social de la discapacidad” donde se enfatiza que el sujeto no es el portador de la discapacidad, sino que ésta es generada por la existencia de contextos inadecuados, estereotipados y rígidos; por lo que ahora en el ámbito educativo, las acciones, estrategias y decisiones no se dirigen hacia el alumno en solitario, sino hacia la relación sujeto-contextos donde se desarrolla su proceso de formación.

Ante esta postura, no podemos seguir estigmatizando al alumno con discapacidad  a solo la adquisición de habilidades sociales, sino por el contario hay que promover ambientes de aprendizaje inclusivos  que le permitan acceder a todas las competencias para la vida, a través de la implantación de estrategias especificas.

 

Mito 6: “A todos los alumnos de USAER no se les reprueba”.

Es cierto que muchos padres de familia y alumnos, sobre todo en el nivel de Secundaria, se han creado la idea de que por ser alumnos que enfrenta BAP, es obligación del docente aprobarlos, ya que a veces se suele evaluar el entusiasmo de los alumnos y no realmente su nivel de desempeño;   Lo cual me lleva a pensar que se “evalúa para aprobar y no para aprender”.

Pero en realidad los alumnos que enfrentan BAP deben ser evaluados bajos los criterios del acuerdo 648, donde la evaluación de los aprendizajes se basa en la valoración del desempeño de los alumnos en relación con el logro de los aprendizajes esperados, debido a que  toda evaluación debe conducir al mejoramiento del aprendizaje, así como detectar y atender las fortalezas y debilidades en el proceso educativo de cada alumno; Por lo que si el alumno por diversos factores no logra los aprendizajes esperados para determinado periodo, si es probable su reprobación, siempre y cuando esté justificada.

Si bien la educación regular ha ido mejorado en sus planteamientos de atención  a la diversidad en todos los órdenes (metodología, evaluación, recursos, organización, dotación de personal, etc.); aún nos queda un camino largo por recorrer para que las escuelas se conviertan en un espacio donde la diversidad pueda apreciarse y practicarse como un aspecto de la vida cotidiana y de enriquecimiento, no obstante este camino será más sencillo si   el docente y el personal de USAER trabajan colaborativamente junto con los padre de familia y directivos de la escuela para optimizar los procesos de aprendizaje de todo el alumno , lo cual nos lleva a tener mayores expectativas de los alumnos, haciendo énfasis en los aspectos positivos del aprendizaje y no en lo que el alumno no logra.

 

Referencias

SEP y DEE. (2011) Modelo de Atención de los Servicios de Educación Especial. México: SEP.

SEP y DEE. (2011) Orientaciones par la intervención de la USAER en las escuelas de Educación Básica. México: SEP.

Artículo publicado en la Revista Xictli de la Unidad UPN 094 Ciudad de México, Centro, México. Se permite el uso citando la fuente u094.upnvirtual.edu.mx