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Año: 2020 Mes: MAYO-AGOSTO Número: 87
Sección: INVESTIGACIÓN Apartado: Investigación Educativa
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LA FORMACIÓN ACADÉMICA EN LAS INSTITUCIONES DE EDUCACIÓN SUPERIOR (IES) Y EL ESTADO DEL ARTE
Mtro. Carlos Guerrero Godoy

Sinopsis: Sin lugar a dudas el estado del arte y el estado del conocimiento de la formación académica en las instituciones de educación superior responden a modelos de formación basados en un paradigma específico y en una didáctica específica ubicada en un tiempo y en un espacio histórico concretos. La formación es vista así como la adquisición de ciertas habilidades, conocimientos, modos de relación y cambio de actitudes.

Palabras clase: Educación Superior; Estado del Arte; Formación

 

 

I

Para desarrollar este ensayo, se parte de la idea de que el proceso de formación docente ha respondido históricamente a los diferentes tipos de didáctica, de los cuales, se pueden distinguir tres grandes tendencias:

-       La didáctica tradicional,

-       La tecnología educativa y

-       La didáctica crítica o socio-histórico.

 

Es así como la formación académica en la educación superior y posgrado cobra distinta importancia en cada una de ellas. Bajo esta perspectiva se considera que la formación se ha dado de diferentes maneras y en diferentes contextos sociales, políticos y económicos.

A través de estas tendencias didácticas, es como se han dado los diferentes tipos de formación, la cual Azucena Rodríguez (1994)  caracteriza como "algo para" o "algo" que se tiene o es adquirido. Es así que cuando se habla de formación  se alude a formación para algo, en este caso, formación docente, siempre ligada a un contenido que la precisa y delimita.

También caracteriza a la formación como la adquisición de ciertas habilidades, conocimientos, modos de relación y cambio de actitudes.

 

II

De acuerdo a  Rodríguez (1994), el saber hacer hace referencia a la formación,                a la autoestructuración, al desarrollo de la persona. Por lo que el sujeto de la formación, o sea el maestro, se le pide no sólo la adquisición de ciertas habilidades  o poseer ciertos conocimientos, sino la transformación de actitudes, el cambio de visión de su propia práctica. Las formaciones vista así como una característica de la persona donde se da una unidad entre ésta y el rol social.

 

La autora plantea que "...todo proceso de formación docente conlleva en forma explícita o implícita la intención de innovar, aunque sea en su forma menos radical, y se plante la formación sólo como actualización. Busca cuestionar y cambiar formas de trabajo calificado como obsoletas, abrirse a nuevas experiencias, mirar el propio hacer con la intención de cambio" (Rodríguez (1994 pág. 5).

 

La formación en la institución permite un mayor acercamiento a los problemas que atañen realmente a los docentes en su práctica, siempre y cuando los procesos formativos partan de la detección de tales cuestiones y no de ideas preconcebidas acerca de "que" debe saber y hacer un docente.

 

Pues la formación fuera de la institución implica el riesgo de un proceso separado de las condiciones concretas de la práctica docente.

 

Por otro lado, Gilles Ferry (1994), plantea que lo que se espera de la formación es el dominio de las acciones y situaciones nuevas, el cambio social y personal, y ya no precisamente la transformación de las estructuras, o sea, el remedio al desempleo y la democratización de la cultura, entre otras.

 

Agrega que de los enfoques de la formación de enseñantes (funcionalista, científico, tecnológico y situacional) "el enfoque situacional es en donde el sujeto de la formación así entendida, es el centro, porque desarrolla una problemática de la formación basada en la relación del sujeto con las situaciones (educativas) en las cuales está implicado, incluyendo la situación de su propia formación" (Ferry 1994 pág. 80).

 

Al revisar brevemente a varios autores que abordan la problemática de la formación, encontramos que usan el término como un sinónimo de educación, a veces como una forma más profunda o referida a lo más valioso y complejo de la educación.

 

Otros autores han utilizado a la formación ligada a un campo específico, que es lo que le confiere sentido y le aporta contenido. Honoré (1990), menciona que "es frecuente que se hable igualmente de la formación en el transcurso de una actividad o refiriéndose a ella, la institución que la organiza, la presenta asociándole otra palabra, todo ocurre como si la formación no tuviese existencia más que con relación a un contenido" (pág. 21).

 

Por su parte,  Ibáñez Martín (1975) señala al respecto de la formación  "... es aquella transmisión (o adquisición) de conocimientos enlazados con las dimensiones de vida propiamente humanas y provistos de una jerarquía interna, que se realiza con el esfuerzo que sea necesario, ni modo tal que incite o no a un conformismo automático sino a una posición personal libre"(pág. 32).

 

Pero en materia de educación, no todo va en dirección del maestro al alumno,  sino que hay casos, en que se convierte en un proceso de constitución profesional a partir de un proyecto propio, que el sujeto en formación realiza activamente, a través de distintos procesos y mecanismos de aprendizaje y conocimiento, que se llevan a cabo en situaciones relacionales, donde resulta fundamental la presencia de otros. A ese proceso se le puede llamar en términos generales formación.

 

De esta manera, la didáctica tradicional parte de una concepción empirista de la educación, donde el aprendizaje del sujeto se da a través de lo que la experiencia le va proporcionando.

 

El conocimiento es sinónimo de memorización y repetición. Los contenidos aparecen esquemáticos y fragmentados, las actividades se basan en la exposición, donde el profesor es el conferencista que domina el saber y el alumno el espectador, esta tendencia da pocas posibilidades a la creatividad.

 

Por otro lado, la tecnología educativa que está orientada por la psicología conductista, que es considerada como el estudio científico de las prácticas educativas, plantea que "... si se hace un estudio científico de las reglas del procedimiento que persiguen modificar una práctica educativa, se hace referencia la tecnología educativa, una técnica práctica fundada en el conocimiento científico"(pág. 5).

 

Propone la sistematización de la enseñanza por medio de la instrumentación de técnicas. Los objetivos son programados y reducidos a conductas observables y medibles. Se presenta como un modelo innovador que prioriza la técnica sobre la teoría y se ocupa del cómo sin atender al qué Y para qué. Convierte al profesor llano en el que domina el saber, si no la técnica.

 

En el caso de la didáctica crítica, producto de la  escuela de Frankfurt, ésta surge como oponente a la postura positivista de la ciencia. De entrada, cuestiona el estado de cosas de la educación, para así analizar el papel del docente, la dinámica institucional, los roles desempeñados, replanteando los alcances de la educación y su relación con factores, sociales, políticos, económicos y psicológicos, etc.

 

Para esta didáctica, el aprendizaje se convierte en un proceso colectivo, de grupo, y deja de ser un proceso individual, y la enseñanza se convierte en un proceso social, político e histórico. Ubica al objeto de conocimiento siempre cambiante y en constante transformación.

 

Por su parte, el modelo de la escuela abierta o modalidades alternativas, que incluyen a la modalidad virtual, se plantea como un modelo nuevo, diferente y sobrepasa a los modelos anteriores. Dentro de la dinámica, no es ni didáctica tradicional, no es ni didáctica crítica.

 

Por el contrario, se plantea como una contraposición al modelo de la didáctica tradicional. Siendo una respuesta a los diferentes sistemas y modalidades de la educación en general, y sobre todo de la educación superior. Dicho modelo presenta formas especiales de trabajo, en donde el profesor debe tener otro tipo de formación innovadora y con el uso de las tecnologías de la información.

 

 Asimismo, el alumno no tiene ese mismo esquema en que originalmente el maestro es el centro, sino que aquí el centro son los materiales y los medios, a través de los cuales gira el alumno. Aquí el alumno tiene una noción de aprendizaje diferente, así como el maestro de enseñanza. La relación directa que se establece en este modelo es material-medios-alumno (conocido en nuestros días como aula invertida).

 

Bajo este esquema general, presentamos el siguiente ensayo, que pretende plantear un tránsito del maestro como formador al maestro como investigador de su práctica educativa.

 

Dicho ensayo está integrado fundamentalmente por una visión específica acerca de la estrategia metodológica para elaborar el estado del arte como un producto de investigación educativa, que el autor Carlos Enrique George Reyes presenta, a través de la definición y conceptualización del estado del arte, como un proceso investigativo a utilizar por los actores y protagonistas de la educación.

 

Lo plantea como un proceso de investigación científica de carácter analítico- interpretativo, bajo cinco momentos: semilla, aproximación al objeto de estudio, de contexto e inventario, analítico e interpretativo. Se abordan las diferentes posturas epistemológicas y aportaciones al Estado del arte, el positivismo, el constructivismo y la teoría crítica.

 

Asimismo, brindamos una visión general del estado del arte en las revistas de investigación educativa de Inglaterra y sus consecuencias en la producción del conocimiento y la investigación educativa.

 

  • Desarrollo

Este ensayo se elabora con el tema La Formación Docente en Educación Superior y el  Estado del Arte, y se toma como fundamento el artículo Estrategias Metodológicas para Desarrollar el Estado de Arte como un Producto de Investigación Educativa,  de Carlos Enrique George Reyes.

 

Este análisis del estado del arte se presenta como un estudio exploratorio, cualitativo e interpretativo, así como documental, al cual se tuvo acceso y que a continuación se describe.

 

Al realizar la lectura de las estrategias metodológicas para elaborar el estado del arte como un producto de investigación educativa, se puede obtener, según la disciplina, una gran variedad de estos productos, ya sea de corte antropológico, político, social, pedagógico o educativo y tecnológico.

 

Según Gómez Vargas, M., Galeano Higuita, C., y Jaramillo Muñoz, D. A. (julio-diciembre, 2015), El estado del arte es una metodología de investigación-cualitativo documental de carácter critico-interpretativo que revisa los estados producidos por las personas en su representación bibliográfica, conformada por tres fases:

-       Planeación y diseño,

-       Gestión y análisis,

-       Formalización y elaboración.

 

Por lo que empezaremos por algunas definiciones que algunos autores han vertido en relación a conceptualizaciones importantes sobre el estado de arte. Según el Diccionario de Oxford, el estado del arte se refiere al uso de las técnicas o métodos más modernos y avanzados, y es un adjetivo que califica a algo como lo mejor que puede presentarse en la actualidad, (Gómez Vargas, 2015).

 

El estado del arte, en el ámbito internacional y latinoamericano, tiene una conceptualización y significado distinto. Por lo que en el ámbito de la reflexión latinoamericana, específicamente en Colombia, Galeano Marín y Vélez Restrepo (2002) plantean que el estado del arte “es una investigación documental sobre la cual se recupera y trasciende reflexivamente el conocimiento acumulado sobre determinado objeto de estudio” (p. 1). 

 

Además, lo consideran como una investigación con desarrollo propio, cuyo fin es develar la interpretación de los autores sobre el fenómeno y hacer explícita la postura teórica y metodológica de los diferentes estudios (p. 424). Por lo que se aprecia, es que el estado del arte es un desarrollo de teoría y práctica, es decir la praxis que se ejecuta  durante la documentación bibliográfica  de un objeto de estudio, un problema o  tema que puede ser un  fenómeno, una idea o una estrategia durante el proceso de investigación, con la finalidad primordial de  obtención de conocimiento, o sea, la praxis.

 

Otras conceptualizaciones sobre el estado del arte nos la brindan autores como Guevara (2016, citado por Reyes, 2019)),  menciona que el estado del arte es una propuesta de investigación y sus productos, así como el desarrollo teórico investigativo y social de un fenómeno  “Su elaboración se constituye como una herramienta esencial para revisar la situación actual de la producción investigativa y hacer un balance de esta”.

 

El estado del arte también se apoya, para una revisión de la literatura, “como un elemento metodológico para comprender las construcciones teóricas a partir de análisis de documentos de corte científico” (Reyes, 2019). Menciona que es una investigación documental, apoyada por la teoría, dándole poder al texto y documentos bibliográficos como puntos valiosos para la investigación y poder tener puntos teóricos de reflexión. (Galeano y Vélez, 2002, citado por Reyes 2019).

 

Mientras que para otros autores, tales como Cifuentes, Osorio, Morales, (1993, citado por reyes 2019), el estado del arte “se relaciona con un proceso de reconstrucción de las aplicaciones de la teoría en un campo de la ciencia a partir de la recuperación metódica, sistemática y ordenada de base de datos, documentos, contenidos y referencias bibliográficas” a partir de esta metodología que reconstruye, se  aclara que no es solamente la recogida de la información, sino que, lo medular es  encontrar el centro de interés del investigador en trabajos científicos que han desarrollado otros investigadores, reconstruyendo la  teoría en las investigaciones aplicadas para interaccionarlas de tal manera, que se vayan catalogando las diversas interpretaciones de un tópico social, epistemológico, político o pedagógico estudiado.

 

Al realizar estudios de grado y hacer investigación científica, preferentemente de maestría o doctorado, es necesario utilizar el estado del arte como una herramienta de búsqueda en un proceso metodológico, con el objetivo de lograr concretar  una idea, un fenómeno o un tópico de un tema  investigativo,  que  esté bien fundamentado, argumentado y elaborado, para con ello poder extraer o generar el conocimiento, el cual se asocia  a una praxis  que puede ser documentada o en forma empírica, que al abordarla  como un proceso metodológico indispensable podrá generar un sistema de creencias  que influyan en la orientación, dirección y técnicas,  que ayudaran a buscar y encontrar respuestas científicas diferentes a las que se conocen, de acuerdo con Cerón y López (2015, citado por reyes 2019 ), y se pretende o quiere encontrar  resultados en su camino, como su  guía y desde la comprensión conceptual.

 

Por lo antes expuesto, la propuesta de tomar una idea o un trayecto para la elaboración de este tipo de  investigaciones, el autor reconoce  cinco momentos,  y menciona que el estado del arte es un  paso inicial  para que se aborde y  comprenda la dirección que ha de tomar un proyecto de investigación. Guevara (2016, citado por Reyes 2019)  

 

En las universidades, tanto públicas como privadas, se debe estar impulsando la investigación en forma consciente y necesaria, que aumente el número de egresados, ya que en la medida que estas acciones se sumen se  logra una posición de calidad en sus programas educativos, indicando que se emplea en la investigación, el concepto del estado del arte. Y los  programas  pueden   incorporarse al  “Padrón Nacional de Posgrados de Calidad “(PNPC)”[1] de acuerdo a Guzmán y García, (2016 citado por Reyes, 2019).

 

Por lo tanto, para entender de donde proviene el término estado del arte y sus conceptualizaciones, se documenta que en las Universidades de los Estados Unidos, se da origen al mismo, se considera como estado de desarrollo de un tópico práctico y tecnológico, y  también es un marco de referencial, para el desarrollo de temas de investigación, con el propósito de comprender el proceso de generación del conocimiento, del tópico planteado, y de interés en la ciencia. Jiménez citado por Guevara (2016).

 

En México, para Jiménez (2009), el estado del arte se hace presente en los ochenta (1981) en el Congreso Nacional de Investigación Educativa (CNIE) bajo  el amparo de la COMIE, (Consejo Mexicano de Investigación Educativa), proveniente del consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT).

 

Para    Jiménez (2009), con la idea de desarrollar temas de interés nacional en el ámbito educativo,  surge  la necesidad de delimitar las prioridades de  la investigación educativa para dar origen a los campos de conocimiento del COMIE en diversas áreas multidisciplinarias, como las colecciones que corresponden a la investigación educativa en México 1992-2002 y estados del conocimiento 2002-2011, donde se da acceso a reglamentar los debates de la actividad investigativa, con enfoques intelectuales distintos (Reyes (2019)..        

 

Es así como el estado del arte tiene un mecanismo de interacción entre un proceso de reconstrucción teórica de las aplicaciones  y con el campo de las ciencias a partir de la recuperación de la información ordenada de los documentos, datos y contenidos bibliográficos.

 

Por lo tanto, al analizar los diferentes conceptos o puntos de vista que se abordan sobre el estado del arte como fenómeno o problema particular de corte científico, nos podemos dar cuenta que no hay un consenso homogéneo de los diferentes autores, para definir el estado del arte, y que pueda converger o no en la generación y obtención del conocimiento.

 

No hay solo divergencias en considerar la búsqueda del estado del arte, también hay coincidencias en elementos comunes que deberá contemplar la investigación,” surgimiento de la idea, recuperación y análisis bibliográficos y articulación de resultados” Guevara, (2016)

 

Cuando se hace una investigación de tipo cualitativo, es muy importante  hacer uso de tres conceptos que apoyan la realización de la investigación: primero, la parte de la hermenéutica, que es el arte de interpretar la comprensión de textos, documentos, datos e imágenes, visualizando su historicidad de lo que se necesita en el acto investigativo y ser crítico al realizarla, con el objetivo de tener un buen antecedente; un segundo concepto es hacer un buen uso de la semántica, como un texto seductor, para decir lo que acontece y darle el toque de un entendimiento universal; un tercer concepto, la acogida de la información, que va a ser útil en la metodología para abordar el objeto de estudio en la investigación.

 

Por lo tanto, el estado del arte es el estado del conocimiento en que se encuentra un tema que se  investiga, el cual  se ayuda de un marco teórico conceptual, para saber que referentes o antecedentes existen y a partir de ahí ir más allá, como  un fenómeno innovador que tenga un impacto social en las diferentes disciplinas

 

  • ESTRATEGIAS METODOLÓGICAS PARA ELABORAR EL ESTADO DEL ARTE

El presente ensayo acerca del estado del arte se realizó a través de la lectura de Carlos Enrique George Reyes, es de corte cualitativo e interpretativo, de tipo documental, al cual  se tuvo acceso y que a continuación se describe. “Los nuevos campos teóricos y metodológicos de investigación se crean a partir del análisis y la lectura crítica de las investigaciones analizadas y sus productos Calvo” (1992 citado por Guevara 2016)

 

Con estos elementos comunes señalados acerca del estado del arte, se proponen cinco momentos para su elaboración, que a continuación se detallan: Reyes, (2019). A continuación se fundamenta cada uno de los momentos mencionados anteriormente:

 

  • Primer momento: Semilla.

En el primer momento, se abordan las posiciones paradigmáticas desde las cuales se puede realizar una investigación de tipo educativo, con el propósito de contar con una clasificación, que  permitan analizar la información y recuperarla en las próximas etapas, de esta forma  se pueden delimitar varias conceptos de la realidad investigativa, asumiendo la postura paradigmática  que orientará  el problema científico que se desea estudiar Páramo (2018, citado por Reyes 2019).

 

Además, las posturas epistemológicas amplían o limitan los proyectos de una investigación. En este momento, Guevara (2016) identifica tres posturas, la positivista, la constructivista y la teoría crítica, sosteniéndose y aproximándose al conocimiento, en forma estadística y en forma dialógica comunicativa, donde se hace obligatorio que el investigador, realice un análisis hermenéutico,  para la comprensión de lo textos. (p. 173). A continuación se explica cada una de estas posturas epistemológicas:

 

 

Postura epistemológica

 

Relación con el estado del arte.

 

Aporte al estado del arte

 

Positivismo

 

 

 

Utilización de variables para obtención de datos 

la descripción de documentos

 

Investigación cuantitativa de descripción, con postura epistemológica alternativa.

 

 

Constructivismo

 

 

 

Al Tomar a la hermenéutica, se aproxima a la comprensión de los textos que son expresión de los investigadores y de las lecturas de las realidades de los contextos investigados.

 

 

Es la aproximación al conocimiento debe ser dialógica y comunicativa.

Los contextos históricos, políticos, sociales y culturales, fundamentales para interpretación de investigación

 

 

Teoría Crítica

 

 

 

En el análisis se articulan lo explicativo y lo comprensivo para develar las contradicciones ideológicas para la crítica del mundo social

 

 

Dialogo reflexivo necesario en la construcción del sujeto

Elaboración propia a partir de Guevara (2016, citado por Reyes 2019):

 

Es así como en el momento semilla el estado del arte se argumenta desde las notas descriptivas de los  fenómenos, y se realiza con el  análisis de los datos estadísticos efectivos para el objeto de estudio.

 

 

  • Segundo momento. Aproximación al Objeto de Estudio

El segundo momento, que se refiere al acercamiento o aproximación al del objeto de estudio, nos permite aclarar qué vamos a entender como el objeto de estudio, sobre el cual vamos enfocar los esfuerzos como docentes en nuestra formación, para llevar a cabo la investigación en  tareas didácticas. Chan (2006 citado por Reyes 2019) sugiere ocho operaciones metodológicas, que deberán tomarse en cuenta como acciones didácticas, que permitan observar al objeto de estudio, como un desarrollo del  estado del arte en forma reflexiva y vinculante.

 

A continuación se detallan las operaciones metodológicas para generar un objeto de estudio (Elaboración propia a partir de Reyes, (2019):

Primera operación.- Establece el discurso que se edifica, los destinatarios del texto y uso que se  dé, claridad sobre que, para qué y para quien se escribe.

Segunda operación.- Ser su propio juez y auto observarse, generar reflexiones del discurso, con el fin de dejar prejuicios y trabajar con el objeto de estudio.

Problematización. Tareas relacionadas con análisis, macro, meso y micro, para identificar problemas que ha de tomarse.

Quinta operación.- Interacción en donde el problema, marco de referencia y los conceptos, se nutren y modifican seguidamente.

Sexta operación.- Corresponde a la teorización, se hace la descripción de los conceptos centrales y su relación entre ellos, para darle significado y sentido.

Séptima operación.- Se construye el marco metodológico, preparando los conceptos ya identificados en la teoría y articularlos a las operaciones anteriores.

Octava operación.- Es el cierre del proceso metodológico, mediante la acción de reflexión para comprender la finalidad de la investigación.

 

Se puede mencionar también la construcción de vínculos entre ellos en las operaciones metodológicas y se hace una síntesis de las mismas. Así mismo,  se hace una visualización del discurso a producir, auto-observación, posicionamientos, problematización, diseño de un modelo heurístico, teorización, construcción del marco metodológico y reflexión sobre la transformación del discurso en producción,  Chan (2006)

 

  • Tercer momento. Contexto e inventario.

Aquí se plantean los límites en los que se desarrollará la elaboración del estado del arte, dentro de los cuales tenemos a los límites temporales y espaciales. Así mismo, se hace la búsqueda, recopilación y organización de un inventario bibliográfico.

Por otro lado,  se delimitan los campos de interés vinculados con la postura epistemológica elegida.

En el mismo sentido, se establecen los núcleos temáticos que orienten el proceso de indagación. Y este momento presenta un reto, que es el de fortalecer los procesos investigativos con tecnologías de información y comunicación.

 

Para ello el autor desarrolla el concepto de literacidad digital, considerado como un saber informático que genere el manejo eficiente de la información (Ramírez y Casillas, 2015, citado por reyes 2019).

 

Se pretende que el investigador logre el desarrollo de conocimientos, habilidades y actitudes en la búsqueda del contenido digital. Se deben tomar en consideración por los investigadores los siguientes elementos: palabras clave, metadatos, adopción de una postura crítica (consulta en bases de datos especializadas, realización de búsquedas avanzadas), aplicación de estrategias determinadas (uso de operadores booleanos, definición de filtros) y tener consideraciones para un manejo adecuado de la información (referencias, difusión, comunicación)

Por lo tanto, para articular la literalidad digital con la elaboración del estado de arte, se deben tomar en cuenta dos indicadores:

1.- las búsquedas efectivas y valoración de información.

2.- la valoración, análisis y síntesis de los recursos que se han recuperado.

 

Con lo anterior,  crear categorías o núcleos temáticos, y analizar las tendencias avances y vacíos en la exploración de un tópico,  trazar nuevos caminos metodológicos y conceptuales.

 

  • Cuarto momento: Analítico.

Clasificación de la información. Para ello, se requiere hacer una reconstrucción teórica de lo ya investigado. Se contrastan las experiencias científicas para encontrar una coherencia teórica y elaborar argumentos interpretativos (Guevara, 2016, citado por reyes 2019).

Con lo anterior se construyen ejes de análisis que constituyen líneas de investigación,  que van a  enriquecer el objeto de estudio.

Por otro lado, se propone una Taxonomía de la investigación propuesta por  Yuren y Molina (citado por reyes 2019), bajo cuatro tipos de estudios científicos:

1.-La de construcción teórica.- elaboración de conceptos a partir de referentes teóricos o empíricos para emerger una nueva teoría.

2.-Los constitutivos, que muestran diagnósticos sobre cómo es la realidad y ofrecen recomendaciones para transformarla.

3.-El prescriptivo que entrega una serie de reflexiones para decir  cómo debe ser la realidad y ofrece modelos para transformarla.

4.-las reflexiones informadas que expresan percepciones de los fenómenos estudiados con referentes de investigaciones previas.

Con estos elementos se establece un vínculo entre los ejes de análisis con los tipos de estudio. El autor considera que es aquí  donde realmente inicia la elaboración del estado de arte de manera eficiente, convirtiendo su elaboración en un producto de investigación.

 

  • Quinto momento: Interpretativo.

Es el momento de hacer interpretaciones para cada uno de los ejes de análisis. Permite conocer porque los investigadores analizan un tema desde una perspectiva y no de otra, así como saber los resultados de la producción científica y clasificarlos desde diversos enfoques.

 

Con ello, se pretende conocer el estado actual de la investigación y de su objeto de estudio de manera global, logrando hacer:

1.- una reconstrucción teórica, donde prevalezca la comprensión de contenidos y la generación de nuevas orientaciones investigativas, y

2.- que el investigador se allegue de herramientas metodológicas para hacer esas comprensiones, con el uso de la teoría fundamentada para comparar posturas teoréticas  (Strauss y Corbin, 2002, citado por reyes 2019).

 

También lograr el análisis semántico del discurso (Ban Dijk, 1985, citado por Reyes 2019), para descubrir así el significado de las secuencias de las oraciones expresadas por el sujeto.

 

El fin que se persigue a manera de sugerencia, que se divulgue el estado del arte como un producto científico (artículo o en revista académica), así se aporta conocimiento científico y el investigador asume la responsabilidad de comunicar sus avances en el desarrollo de la ciencia y de una descripción  en particular.

 

Con ello se generarán importantes ideas para producir investigaciones que se adhieran a nuevas tendencias investigativas o a vacíos teórico- empíricos.

 

A manera de ejemplo para utilizar la estrategia del estado de arte, observamos en las Revistas de Investigación Educativa del Reino Unido (Baker y Connolly, 2018), estudio que se hace con el fin de conocer cuál es el estado actual que guarda la publicación e intención de estas revistas.

 

Se parte de algunos desafíos que enfrenta en relación a una serie de problemas que están presentes, como su accesibilidad por los grupos de interés, la economía para publicar, la evolución de las tecnologías y su uso, la posibilidad de publicación de acceso libre, partiendo del hecho de que su financiamiento se hace con fondos públicos, lo que ha generado en los editores fines lucrativos, que impiden cumplir con el propósito de las revistas.

 

El reto que se tiene al conocer el estado de arte de la investigación educativa a través de su difusión en estas revistas, es superar la desigualdad educativa y económica, de acuerdo a las reformas sociales, económicas e institucionales. Michelle Jackson, 2017 (citado por Baker y Connolly, 2018) en su artículo El Debate Sobre la Estratificación Social (la pobreza y las desigualdades en el rendimiento escolar), en el tema denominado conversación Uno, plantea que se pierde el impacto simple y profundo de la pobreza y la desigualdad en el rendimiento escolar y las oportunidades de vida.

 

En el escrito denominado conversación Dos, se centra en los cambios que serán necesarios para reducir la desigualdad, planteando que sin cambios sociales, políticos y económicos de gran alcance no desaparecerán la desigualdad de educativa ni la pobreza.

 

Por lo que su idea principal y de Gran relevancia para el objetivo de las revistas de investigación educativa, debería ser impulsar los cambios en la disciplina e identificar las estrategias pragmáticas para mejorar los problemas actuales, que permitan superar las desigualdades educativas bajo un sistema educativo socialmente justo, por lo que el fin de las revistas de investigación educativa deben de desempeñar un papel fundamental en el debate sobre un sistema educativo social mente justo, donde el objetivo de las revistas científicas sea el crear espacios de debate sobre el tema de la investigación educativa.

 

III

A modo de conclusión, considerando los elementos más importantes antes planteados,  podríamos apuntar lo siguiente:

 

  • A pesar de que en la actualidad se ha desarrollado bastante literatura a nivel internacional así como latinoamericano acerca de la formación académica y o docente, existen grandes desafíos para los protagonistas del hecho educativo, que incluyen a los investigadores del campo educativo, escritores y especialistas de las disciplinas encargadas de investigar a la educación; así como los especialistas de los campos y disciplinas específicas en investigación educativa.

 

  • Desde lo general hay grandes avances en la pedagogía, en la psicología, en la sociología y en las disciplinas afines qué tienen que ver con el comportamiento el individuo en la educación, y específicamente en la formación académica y docente. En lo general cada institución de educación superior ha asumido su responsabilidad, a través de sus modelos educativos y modalidades alternativas, para participar en la formación de sus cuadros académicos. En lo particular, los docentes de las diferentes instituciones, también asuman su responsabilidad individual para su formación en el campo específico de la docencia.

 

  • Nos queda claro que el formador de alumnos, debe generar un compromiso personal para formarse en la disciplina específica al campo y modelo educativo  en el que desarrolla su actividad; también debe desarrollar su formación en la modalidad específica que le permita contextualizar sus actividades académicas.

 

  • En relación a la formación docente,  en las instituciones de educación superior, es claro que el formador, el maestro, no ha tenido la posibilidad de desarrollar una formación magisterial, una formación inicial, como es el caso de las escuelas normales para los que se van a dedicar al campo educativo en la educación básica, por lo que se forman como licenciados en preescolar, primaria y por especialidad. Por lo tanto, los que se han dedicado a la educación superior,    han desarrollado una formación en servicio, los que han asumido una responsabilidad personal en su formación.

 

 

  • En términos teóricos, y como resultado del seminario de formación docente,  observamos:

-Una gran cantidad de literatura propia a la formación docente, a nivel internacional, a nivel latinoamericano y a nivel nacional.

-Se ha desarrollado la formación de acuerdo a modelos educativos institucionales, así como la investigación educativa como una forma de innovación y de evaluación docente.

-Se reconocen diferentes corrientes del pensamiento, tales como el positivismo, que da como resultado la sistematización de la tecnología formalizada e institucional, así como la alternativa que brinda la teoría crítica.

-En cada corriente han sobresalido grandes investigadores y autores de la investigación educativa.

-Se han desarrollado tres tipos de formación o tres tipos de didáctica, la tradicional,  la tecnología educativa y la didáctica crítica.

-Es necesario reconocer las bondades que brindan los posgrados para acercarse al campo de la formación docente y a la investigación educativa.

-Tomar en cuenta, como alternativa en la formación docente,   las bondades de la investigación educativa y la elaboración del Estado del arte, de acuerdo al objeto de estudio y como resultado de su quehacer docente.

- Como parte de la formación del docente de las instituciones de educación superior, que no sólo se tiene que preocupar por el dominio de su materia específica al campo profesional, sino al saber del campo pedagógico y didáctico, así como del alumno como sujeto de conocimiento.

-Se reconoce el papel histórico que el docente de educación superior ha adquirido a través de su formación y de las diferentes instituciones educativas de nivel superior, y que puede ser profesor, docente, académico, asesor, tutor. Todo ello dependiendo del modelo y la modalidad alternativa en que se desenvuelva.

-Así mismo, se ha pasado de la escuela tradicional o escolarizada a los sistemas abiertos y a distancia, y de estos a las modalidades alternativas, como es el caso de la modalidad virtual.

-Es claro que en su formación, el docente en la actualidad tiene que desarrollar el conocimiento sobre el manejo y uso de las tecnologías de la información, y que sin ello en las situaciones emergentes que está viviendo la sociedad mundial, el docente está perdido. Sea dicho de otra manera, el docente va a estar automatizado y enajenado, descontextualizado, lo que le va a impedir el tránsito a la formación crítica.

 

Por otro lado, y en términos prácticos:

-Debe de existir en el formador un tránsito de la didáctica tradicional hasta la didáctica crítica.

-Debe haber un tránsito de la teoría a la práctica, y que la formación debe ser situacional o contextual. Así como debe haber, como parte de la formación docente, un vínculo entre la escuela y la sociedad, el texto y el contexto, una dialecticidad teoría-práctica.

-El docente debe de participar no sólo en el plano de la actividad en clase, sino de acuerdo a las políticas públicas y a las necesidades de la institución y de los alumnos, debe ser asesor y tutor, y poder realizar investigación educativa que le permita comprender más su objeto de estudio. Debe ir más allá del salón de clase y emergentemente abordar las bondades del aula invertida.

 

 

 

FUENTES DE CONSULTA

  • Ibáñez, Martin (1975). Hacia una Formación Humanística. Edit. Herder, Barcelona.

 

  • Honore, Bernard (1990).Para una Teoría de la Formación. Edit. Narcea, Madrid.
  • Gómez Vargas, M., Galeano Higuita, C. y Jaramillo Muñoz, D. A. (julio-diciembre, 2015). El estado del arte: una metodología de investigación. Revista Colombiana de Ciencias Sociales, 6(2), 423-442.

 

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[1] El PNPC es un programa del sustantivo del consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) de México.


Artículo publicado en la Revista Xictli de la Unidad UPN 094 Ciudad de México, Centro, México. Se permite el uso citando la fuente u094.upnvirtual.edu.mx

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